El Laverinto Del Eclipse-Chapter 15: Capítulo 3 – La Masacre en la Niebla
Chapter 15 - Capítulo 3 – La Masacre en la Niebla
El aire estaba cargado de muerte.
La cabaña era un ataúd esperando cerrarse sobre ellos. Los Espectros y los Cazadores se acercaban, rodeándolos como lobos hambrientos. La niebla se espesaba, oscura y turbia, retorciéndose como si tuviera vida propia.
Un segundo disparo destrozó otra ventana.
—¡Muévanse! —gritó Gideon, tirando una mesa al suelo para improvisar una barricada.
Kai rodó por el suelo hasta cubrirse tras una estantería derruida. Lía se pegó contra la pared, cargando su ballesta con rapidez.
Afuera, las sombras se movían. Ojos brillaban en la oscuridad.
—No son solo Espectros —susurró Lía—. Hay humanos con ellos.
Gideon maldijo por lo bajo.
—Los llaman los Heraldos del Eclipse. Fanáticos... creen que el virus es una bendición, que nos convertirá en algo más.
Kai apretó los dientes.
—Y parece que saben que estamos aquí.
Otro disparo golpeó la puerta. Luego, silencio.
Algo estaba por pasar.
💀 La emboscada
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El sonido de madera crujiendo hizo que Kai se girara. Alguien había subido al techo.
—¡Van a entrar! —advirtió Lía.
Antes de que pudiera reaccionar, la pared explotó en astillas. Una figura oscura se abalanzó sobre ellos.
Kai se lanzó hacia atrás justo cuando una criatura se estrelló contra la mesa, gruñendo como un demonio. Era un Espectro, pero diferente. Su piel estaba cubierta de venas negras, su boca era una fisura llena de dientes.
No era solo un infectado... era un depredador.
—¡Dispara! —gritó Gideon.
Lía ya lo había hecho. La flecha impactó en el pecho de la criatura, pero ni siquiera se inmutó.
—Mierda... —susurró.
La bestia rugió y se lanzó sobre Kai.
⚔️ Lucha por la supervivencia
Kai rodó por el suelo justo antes de que las garras del Espectro lo partieran en dos. El monstruo era rápido. Demasiado rápido.
Gideon le disparó con su revólver. La bala explotó en su cráneo... pero siguió avanzando.
—¡No les sirve apuntar a la cabeza! —gritó Gideon—. ¡El virus ya regeneró su sistema nervioso!
Kai no pensó. Clavó su machete en el cuello de la criatura. La hoja quedó atorada en la carne mutada, pero la bestia rugió y lo lanzó contra la pared.
—¡Kai! —gritó Lía.
Su visión se nubló un segundo. Dolor. Pero no podía rendirse.
Cuando volvió a enfocarse, vio que Lía había tomado una antorcha improvisada. El fuego.
—¡Gideon! —Lía le lanzó la antorcha—. ¡A las heridas!
El viejo no dudó. Prendió fuego al machete de Kai y lo hundió en el torso del Espectro.
La criatura se retorció. Esta vez sí gritó.
—¡Se queman! —gritó Kai, levantándose—. ¡La niebla los hace más fuertes, pero también más vulnerables al fuego!
Gideon asintió. Pero ya era tarde.
💀 Alguien tiene que morir...
El Espectro cayó al suelo, su cuerpo retorciéndose entre llamas. Pero la puerta se rompió.
Más figuras entraron. Humanos armados.
Uno de ellos disparó.
Gideon se tambaleó.
Kai vio la sangre oscura expandirse en su abdomen.
—No... —susurró Lía.
Gideon se sostuvo en una silla, respirando con dificultad. Pero en sus ojos no había miedo.
—Corran.
Un último sacrificio.
Kai sintió una furia ardiente en su pecho. No podían perderlo así.
Pero Gideon ya había decidido. Se arrancó la bala del abdomen con una mueca.
—¡Salgan! ¡Ahora!
Tomó un cóctel molotov de su bolso y lo lanzó al suelo.
🔥 Las llamas estallaron en un rugido feroz.
Kai sintió la fuerza de Lía tirando de su brazo. No podían quedarse.
—¡Gideon! —intentó correr hacia él, pero el fuego ya lo consumía todo.
La cabaña ardió.
Y entre las llamas, Kai vio la última sonrisa de Gideon antes de desaparecer en el infierno.
💀 Huida en la Niebla
Kai y Lía corrieron. Los disparos resonaban detrás de ellos, pero la niebla los cubría.
Sus pies tropezaban entre raíces y rocas. Pero no se detuvieron.
Lía respiraba entrecortadamente. Los ojos llenos de rabia y tristeza.
—No debió morir así...
Kai no dijo nada. Porque sabía que, en este mundo, nadie tenía la muerte que merecía.
Solo quedaba seguir adelante.